·Inspiración de María Magdalena·
El pasado 22/3/21, al regresar del retiro "Santo Grial" que facilitamos en Francia junto a Janosh y Robert Bridgeman, recibí este mensaje que hoy siento compartir aquí. De nuevo la presencia amorosa de María Magdalena viene a recordarnos lo esencial y a veces olvidado en nuestros actos cotidianos:
Habláis mucho últimamente del femenino y la energía femenina... y no en vano, pues bien cierto es que la necesitamos. Hoy vengo a compartir esta aportación. Entregarse al femenino es tener una dirección y gozar al dejarse sorprender por la magia en el camino. Cuando te entregas al presente y fluyes con el sentir de tu corazón, se abren senderos, portales y sensaciones que guían tus pasos y te brindan el regalo de sentirte viva, la alegría y dicha de vivir. Son los guiños y señales que confirman tu existencia, la pureza y brillo de tu Ser. Encontrar el Santo Grial es dejar de buscar, mas disfrutar del momento exquisito que no sabe más que de ese eterno instante que no busca ni encuentra, pues tan solo Es y celebra su existencia. Benditas sois amadas, que con vuestro útero sagrado contenéis la fuerza y poder de la creación, la sensibilidad se expresa en cada uno de vuestros actos. Todo lo que hacéis y desprendéis es pura sexualidad sagrada. Creatividad y Creación. Sostén, contención y nutrición. No olvidéis cultivar y equilibrar esa energía con la misma fuente y origen que sois. Rodearos de mujeres. Recordaros los poderes, el Amor y la Belleza que sois. Amaros, no juzgaros. Todas tenéis el mismo llamado, pues es vuestro más anhelado reclamo. ¿Recuerdas? En vuestro útero está el latido del corazón universal, la fuente, el origen que merece ser respetado y honrado. Sacerdotisas de Isis, no uséis vuestro poder sexual y sensual para seducir y manipular; ponedlo al servicio de los nuevos hombres del mundo para que reconozcan también el sagrado femenino y el sagrado masculino que en esencia ellos son. Vosotras recordáis la ternura y la empatía. Ellos recuerdan el coraje y la valentía. Unid vuestras polaridades y ponedlas al servicio individual y colectivo. Sed comprensivas y compasivas, no vengativas. Creación, no destrucción. La suavidad es la clave. La lucha ha terminado, en ti y en el prójimo.
Gracias, gracias, gracias. Yo soy Maria, la Magdalena.
Gracias, Miriam, muy profundos los mensajes, que recibes, me paso algo maravilloso, mientras lo leia,sentí un aroma, a escencias mágicas, traté en lo máximo que pude vivencias desde el alma tan hermosa experiencia y decodificar el mensaje implícito. Gracias de corazón a corazón ❤.